A Kutná Hora se la conoce como la ‘ciudad de la plata’. Y es que esta pequeña ciudad ubicada en la región de Bohemia Central, en la República Checa, debe su esplendor y su importancia en la historia a sus minas de plata.
De hecho, estas minas fueron las que durante los siglos XIII y XIV, la convirtieron en la segunda ciudad de Bohemia, llegando incluso a competir con el liderazgo de Praga a nivel económico y político.
Su declive empezaría en el siglo XVI con la inundación de las minas, la insurrección de Bohemia frente a Fernando I de Habsburgo y la llegada de plata del Nuevo Mundo. Kutná Hora perdió parte de su importancia, pero hoy en día todavía conserva palacios y edificios de alto valor arquitectónico. De hecho, su casco histórico fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO en 1995.
Situada a poco más de 80 km de Praga, Kutná Hora es una de las excursiones más populares para hacer en un día desde la capital checa. Pero, ¿realmente vale la pena? ¡Rotundamente sí! En este artículo te contaremos todo lo que hay que ver en Kutná Hora en 1 día, a ver si te convencemos para visitar esta preciosa ciudad que fue uno de los mejores descubrimientos de nuestra ruta por la República Checa.
Cómo llegar a Kutná Hora desde Praga
En nuestro caso llegamos a Kutná Hora en coche de alquiler, ya que era una de las paradas que teníamos prevista durante nuestra ruta de 9 días por la República Checa, però si queréis visitar Kutná Hora desde Praga usando el transporte público, podéis llegar hasta allí en autobús o en tren.
Lo más cómodo es viajar hasta Kutna Horá en tren desde la estación central de Praga, Hlavni Nadrazi. El trayecto tarda unos 50-60 minutos y los trenes salen con una frecuencia aproximada de una hora. El precio y los horarios se pueden consultar a través de la página oficial de ferrocarriles de la República Checa.
Debes tener en cuenta que la estación de trenes de Kutna Horá está en las afueras, así que para llegar hasta el centro histórico, a unos tres kilómetros de distancia, deberás coger otro tren, un autobús o bien ir andando. Si optas por coger el tren de cercanías la primera parada es el barrio de Sedlec, donde se encuentra el famoso osario, y la siguiente es Kutna Horá Mesto, la más próxima al centro.
Otra opción, para facilitaros la visita es contratar una excursión organizada de medio día a Kutná Hora desde Praga.
Tours y excursiones para visitar Kutná Hora desde Praga
Dónde alojarse en Kutná Hora
El centro histórico de Kutná Hora cuenta con una amplia oferta de alojamiento. En nuestro caso, pero, estuvimos alojados a unos 20 minutos de distancia en coche, en un antiguo castillo reconvertido en hotel, el Chateau Hostačov, una experiencia única y muy recomendable.
Ubicado en medio de un bosque y una zona verde excepcional, este establecimiento cuenta con habitaciones decoradas siguiendo el estilo renacentista. Entrar en su biblioteca o en su salón es como entrar en una serie o película del estilo de Los Bridgerton. Además, ofrecen desayunos y cenas de mucha calidad por un precio más que razonable.
El mapa de Kutná Hora
A continuación, te dejamos un mapa con todos los lugares que nombraremos en este artículo sobre qué ver en Kutná Hora, para que te sean fáciles de localizar.
Qué ver en Kutná Hora
La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
Aunque a veces se la califique de catedral, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y San Juan el Bautista del Monasterio de Sedlec es eso, una iglesia. Fue fundada en 1280, por la orden cisterciense, como parte de un monasterio y está ubicada en el barrio de Sedlec, un poco alejada del centro histórico de Kutná Hora. Fue el mayor edificio religioso del país hasta la construcción de la catedral de San Vito, en Praga, y está en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1995. Pese a su antigüedad, no os esperéis una iglesia con muros de piedra oscurecidos por el paso del tiempo y grandes vitrinas góticas, ya que el templo ha sido restaurado siguiendo un estilo bastante austero y las paredes y los techos fueron pintados de color melocotón, algo que contrasta bastante con su imagen exterior.
La Capilla de Todos los Santos, Osario de Sedlec de Kutná Hora
A cinco minutos de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, también en el barrio de Sedlec, se encuentra uno de los lugares más visitados de la ciudad y también de la República Checa, el Osario de Kutná Hora.
Está bajo la Capilla de Todos los Santos, ubicada en medio del cementerio. Antiguamente, este camposanto era considerado sagrado y mucha gente pedía ser enterrada aquí. Durante la Edad Media se construyó esta iglesia y, para custodiar todos los huesos desenterrados se hizo una capilla inferior. A finales del siglo XIX era tal la acumulación de huesos que se encargó a František Rint, un tallista, que diseñase un espacio para colocar los huesos de forma más ordenada. Al buen señor no se le ocurrió otra cosa que decorar las paredes, los techos y las lámparas con huesos. Para algunos visitantes se trata de una experiencia bastante curiosa, prueba de ello lo dan las miles de visitas que recibe el lugar cada año, pero a nosotros nos pareció bastante tétrico y nos removió un poco que los restos de miles de personas estuvieran expuestos de ese modo.
En temporada alta suelen formarse bastantes colas para comprar la entrada para acceder al Osario de Sedlec, así que lo mejor es adquirirlas con antelación, ya que requieren reserva de día y hora.
La iglesia de Santa Bárbara, catedral de Kutná Hora
Si un edificio destaca por encima del resto en Kutná Hora es la catedral de Santa Bárbara, Svatá Barbora en checo. Aunque por motivos arquitectónicos se la denomina catedral, porque posee más de tres naves, cinco en total, y un extenso sistema de contrafuertes y arbotantes, en realidad es sólo iglesia porque no tiene transepto ni es sede de ningún arzobispo.
Tanto el interior como el exterior son impresionantes, especialmente sus vidrieras, algunas instaladas en 2014, y su característico tejado.
Por la vinculación de la ciudad de Kutná Hora con las minas de plata, obviamente, la catedral está dedicada a la patrona protectora de los mineros.
Justo al lado de la catedral se puede visitar la capilla del Corpus Christi, una capilla tardogótica que debía usarse como osario, pero finalmente se dejó vacía.
El colegio Jesuita de Kutná Hora
De camino a la catedral de Santa Bárbara, uno pasea por delante del antiguo Colegio Jesuita. Se trata de un edificio bastante simple y sin mucho ornamento, con algunos toques barrocos, pero lo más espectacular es caminar por el paseo adyacente al colegio decorado con grandes estatuas que recuerdan al famoso puente de Carlos de Praga.
El centro de arte Gask
Hoy en día, el colegio Jesuita no funciona como tal, sino que sus muros acogen el centro de arte GASK, Galerie Středočeského kraje en checo, una muestra artística de las artes de los siglos XX y XXI. Las piezas de arte moderno llenan las paredes y las salas de este espacio de acceso gratuito donde también hay cafeterías en sus terrazas exteriores e incluso una sala de juegos para los niños.
La iglesia de Santiago en Kutná Hora
Aunque la iglesia de Santiago no es una de las más famosas de Kutná Hora, su silueta aparece en la gran mayoría de las fotografías de la ciudad, ya que su campanario es fácilmente divisable desde cualquier rincón. Este templo, consagrado a Santiago, el patrón de los mineros, debía tener dos torres iguales, pero la segunda torre no llegó a construirse debido a la inestabilidad del terreno, ya que el subsuelo está lleno de zonas huecas por su cercanía a la mina de plata.
La Corte Italiana, la antigua ceca de Kutná Hora
Debido a la importancia de Kutná Hora en el siglo XIV, justo por detrás de Praga, se dotó a la ciudad de un palacio real que sirvió a su vez de sede central de la ceca. Aquí fue donde se acuñaban los groses de Praga, que se elaboraban con la plata que se extraía de las minas. Esto convirtió el edificio en el centro económico de una ciudad que fue la más rica de la zona durante el siglo XIII.
Hoy en día hay una exposición de monedas antiguas, de otros elementos que rememoran la historia de este lugar y también se pueden visitar algunas salas y la capilla.
El Museo del Chocolate
Aunque en el cartel de entrada se leen las palabras “Museo del Chocolate”, se trata de una pequeña sala donde se acumulan recuerdos de la que fue la fábrica de uno de los mejores chocolates del mundo, el chocolate Lidka. Puede que el nombre no te suene, ya que estamos hablando de una marca que dejó de producirse en los años cincuenta, pero entre los pequeños y repletos estantes se conservan imágenes, polvo de cacao con más de 100 años de historia, tabletas de chocolate de 1948…
Lo curioso es que, unos enamorados de Kutná Hora y del chocolate, decidieron recuperar algunas de las recetas en 2018 y desde entonces vuelven a producir chocolate Lidka. Estos últimos años han ganado varios premios y, si os apetece, en su pequeña tienda podréis hacer una degustación de chocolate antes de decidir qué variedad os apetece comprar.
La Casa Dacicky, el centro de interpretación del Patrimonio de la Humanidad
La Casa Dacicky, situada en el centro histórico de Kutná Hora, se ha remodelado por completo, desde los sótanos hasta el ático, y en su interior se puede visitar una exposición interactiva que hace un repaso de los monumentos y lugares de la República Checa inscritos en la lista de Patrimonio de la Humanidad de Unesco. Aparte de la exposición permanente, ofrece muchos recursos educativos para hacer la visita más amena y entretenida.
Los miradores de Kutná Hora
Kutná Hora es una de las ciudades monumentales más bonitas de la República Checa. Su ubicación, a diferentes alturas, regalan al visitante unas panorámicas magníficas de todo su casco histórico. Justo delante de la iglesia de Santiago se encuentra uno de los miradores con mejores vistas sobre la catedral de Santa Bárbara, pero no es el único. Son muchas las calles y los rincones desde los que se puede disfrutar de fantásticas vistas sobre Kutná Hora.
Siguiendo el sendero real de Kutná Hora
Desde uno de los laterales de la catedral de Santa Bárbara sale un camino, llamado sendero real, que cubre parte del desnivel de la ciudad, regalando al visitante unas fantásticas vistas del templo y de toda la ciudad. Nosotros sólo recorrimos un pequeño tramo, que nos permitió acercarnos hasta la zona dónde habíamos aparcado, pero fue un colofón impresionante para cerrar nuestra visita a Kutná Hora.
Vale la pena visitar Kutná Hora en un día
Aunque solamente puedes dedicar un día a visitar Kutná Hora te aseguramos que no te decepcionará y, seguramente, te quedarás con ganas de más. Es una ciudad pequeña, que se recorre con facilidad y con un montón de atractivos.
Si quieres nuestra opinión, te diríamos que priorices la catedral de Santa Bárbara y el centro histórico por delante del osario de Sedlec. Aunque es uno de los lugares más famosos y visitados de Kutná Hora a nosotros no terminó de gustarnos, nos pareció demasiado macabro, en cambio, la catedral de Santa Bárbara nos encantó. ¡Es impresionante!
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